sábado, 31 de enero de 2009

Hago mías las palabras de Esteban Beltrán, Director de Amnistía Internacional - Sección Española:



"Coincidirás conmigo en que la lapidación es una forma especialmente atroz de pena de muerte y parece increíble que en el siglo XXI se siga aplicando una práctica tan terrible.

Sin embargo, Irán tropieza con la misma piedra y, a pesar de haber anunciado el fin de dicha práctica, en diciembre dos personas murieron lapidadas y al menos otras diez corren el riesgo de ser lapidadas en cualquier momento.

¿Sabías que las piedras utilizadas en las lapidaciones no pueden ser ni muy pequeñas (para que causen dolor), ni muy grandes (para no matar al condenado en seguida)? ¿Sabías que es una pena específicamente impuesta en casos de adulterio, acto que ni siquiera constituye delito en la mayoría de los países del mundo?

Tras décadas de campaña de Amnistía Internacional por el fin de la pena capital, lo cierto es que el mundo camina con paso decidido hacia la abolición de la pena de muerte. Y vamos a seguir trabajando con la misma determinación.

Por eso pedimos al Gobierno iraní que prohíba de una vez y por ley esta forma de ejecución. ¿Puedo contar contigo? Al menos diez personas confían en nuestra capacidad de presión; no les des la espalda y únete a nuestra petición cuanto antes. ¡Firma ahora!

Si puedes, reenvía este mensaje a tus contactos para que puedan participar en esta lucha por la dignidad humana y descárgate un banner que nos ayude a recoger más firmas."

3 comentarios:

angel almela dijo...

Yo, amigo Joaquín, ya he firmado.
¿Servirá de algo?
SOMOS EL TIEMPO
Somos el tiempo

Joaquín Salmerón Juan dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Joaquín Salmerón Juan dijo...

Gracias Ángel. Recuerdo que en 2002 los millones de firmas mandadas desde todos los rincones del mundo al gobierno de Nigeria lograron anular la lapidación de Safiya Hussaini y de Amina Lawal y desde entonces se suspendió la lapidación como pena. El gobierno iraní creo, o quiero creer, que será también sensible a esta campaña antes o después. Ojalá que sea antes. Toda pena de muerte evidencia el fracaso moral de una sociedad pero el ensañamiento de su método da más nausea aún.